ARAGONITO



El nombre de aragonito deriva de la localidad de <<Molina de Aragón>>, en la provincia de Guadalajara, donde se descubrió el mineral. El aragonito, forma rómbica del carbonato cálcico, cristaliza como calcita en el sistema trigonal y como vaterita en el hexagonal. Se trata de una especie cuyas variedades son especialmente apreciadas por los coleccionistas.

 

- ASPECTO GENERAL DEL ARAGONITO - 

El aragonito se presenta en cristales alargados o aciculares, a menudo reunidos en agregados radiales o en penachos; son también comunes las maclas de contacto o compenetración y las formas pseudohexagonales. El aragonito se encuentra asimismo en concreciones, en forma de pisolitos (literalmente, <<piedra-guisante>>, formaciones similares a pequeñas esferas); otros hábitos son el columnar, estalactítico y estalagmítico. Los que presenta forma de coral reciben el nombre de coraloideos o flor de hierro (flos ferri). Se presenta en varias tonalidades de incolora a blanca o amarillo crema e incluso rojiza.

 

- PROPIEDADES FISICOQUÍMICAS DEL ARAGONITO - 

El aragonito es un mineral poco pesado, blando y frágil, con una exfoliación que da formas prismáticas. Es transparente o translucido y presenta un brillo generalmente vítreo, pero también resinoso. Es infusible según la escala Kobell, y si se somete a calentamiento se modifica recristalizando en la forma trigonal y decrepita (es decir, libera instantáneamente una elevada cantidad de gas). Es soluble en ácido clorhídrico, incluso en frío, desarrollando una notable efervescencia. Es fluorescente y emite una débil luz multicolor; verde, azul, amarillo pálido o rosa. Es un mineral bastante "inestable" en condiciones ambientales normales, y se transforma en calcita si se calienta.

 


- FORMACIÓN Y ASOCIACIONES DEL ARAGONITO - 

El aragonito se forma en rocas metamórficas como los esquistos <<de glaucofana>> (es decir, que contienen un mineral homónimo) y en ambientes sedimentarios, en cuevas de regiones calcáreas, en filones hidrotermales y en fuentes termales. 

Está presente en las estructuras esqueléticas de organismos marinos, como en algunos moluscos y celentéreos. A menudo está asociado con cuarzo, zeolitas y magnetita.

 

- LAS VARIEDADES DEL ARAGONITO - 

El aragonito es una de las formas del carbonato cálcico, pero tiene a su vez muchas variedades. El aragonito flor de hierro, llamado así por su presencia en las minas de siderita (un carbonato de hierro) de Austria, es una variedad de color blanco opaco, que presenta formas similares a las de los corales, de los que recibe el nombre.

La mossottita, cuyo nombre deriva del investigador italiano Mossotti, es una variedad rica en estroncio, que se distingue gracias al color azul y al aspecto fibroso-radiado.

La tarnowitzita, cuyo nombre deriva de Tarnowitz, una localidad polaca, es una variedad rica en átomos de plomo. La nicholsonita, en cambio, es una variedad rica en cinc, o el cuproaragonito que es rico en cobre.

 


- DÓNDE BUSCAR Y CÓMO RECONOCER EL ARAGONITO -

La zona más rica en aragonito es, lógicamente, España, y concretamente Molina de Aragón, donde abundan los cristales prismáticos en maclas pseudohexagonales. 

Éstos también se hallan en Cuenca (Minglanilla), Burgos, Palencia, etc. 

Cristales aciculares de aragonito se han encontrado en varios lugares de Cataluña y Andalucía, pero los mas espectaculares son, sin duda, los de Eugui (Navarra), que pueden llegar a alcanzar hasta 15 cm de longitud, y los de Pantoja (Todelo) formados en esferas "erizadas" completas con unas excelentes cristalizaciones aciculares y con tonos de color desde blancos a fuertes tonos de naranjas (y son fluorescentes a luz ultravioleta) tanto aislados en los huecos de la arcilla matriz o en grandes grupos unidos entre sí, siendo piezas muy deseadas por los coleccionistas por su estética.

La variedad flos ferri ha sido descubierta en distintos puntos de España, pero los mejores ejemplares proceden de Cantabria (Matienzo), en Eugui (Navarra)

y en Toral de los Valdos (León), se han hallado muestras en distintos tonos de azul.

Se encuentra también en el sur de Francia, Italia, Gran Bretaña, en las minas de hierro de Estiria (Austria) y cerca de Laurion (Grecia). Hermosos ejemplares proceden de Guanajato (México), de los yacimientos de Beatty, Nevada, y de numerosas áreas de Arizona y de Nuevo México (Estados Unidos), así como de Pakistán y de Tsumeb (Namibia).

También se encuentran de forma más puntual diferentes tipos de aragonitos en Marruecos, China, Machow (Polonia), República Checa y Eslovaquia. 

El aragonito se distingue de la calcita por la menor exfoliación, y de otros minerales por su reacción el ácido clorhídrico.